Estoy seguro de que a muchos de nuestros lectores la afirmación de que el VIH –presunto virus causante de una “enfermedad” llamada Síndrome de Inmunodeficiencia Humana o SIDA (AIDS por sus siglas en inglés)- ...
El VEH, un virus tremendamente peligroso, ha infectado ya a medio planeta. Sumamente contagioso se introdujo hace ya muchos años en los núcleos de células sociales básicas como la ONU, la OMS, la FDA (la agencia estadounidense ...
Independientemente de que el SARS-CoV-2 al que se achaca la Covid-19 exista o no, de que sea un virus natural cuyo origen es un murciélago o un virus cuyo ARN se modificó en laboratorio y de que se escapara del mismo o fuera expandido a propósito la declaración de pandemia por parte de la otrora independiente Organización Mundial de la Salud (OMS) hoy controlada por un pequeño grupo de multimillonarios “filantrópicos” que dicen financiarla por “altruismo”- es aberrante y delictiva....
LECTINAS: PROTEÍNAS SALUDABLES DEMONIZADAS COMO “ANTINUTRIENTES”Las propiedades citotóxicas, antitumorales, antimutagénicas y anticancerígenas de las lectinas, grupo de proteínas presentes en la mayoría de los vegetales y en algunos animales y microorganismos, se han convertido en nuevo centro de interés de investigación biomédica por su potencial para ayudar a desarrollar “fármacos diana” con los que tratar el cáncer minimizando -eso dicen- los efectos adversos de los quimioterápicos actuales. Y es que la industria farmacéutica sigue sin querer reconocer que una simple dieta basada fundamentalmente en vegetales reduce la incidencia de la obesidad, la diabetes, los trastornos inmunes, el mismo cáncer y otras muchas patologías; prefiere obviarlo para poder seguir elaborando fármacos con unas proteínas ya presentes, de hecho, en muchos alimentos. Es más, tales lectinas han empezado a ser “demonizadas” por empresarios con pocos escrúpulos que afirman ahora -falsa y gratuitamente- que son ¡las principales responsables de la mayoría de las enfermedades! y de ahí que las califiquen de “antinutrientes”. Su idea ha sido crear un problema inexistente para vender sus productos alegando que con su ingesta se resuelve el problema; estamos pues ante un nuevo caso de marketing vergonzoso al que pretende darse “pedigrí científico” y que las autoridades sanitarias consienten con su inacción. Les explicamos qué hay detrás de todo esto.