Las medidas adoptadas por el Ministerio de Sanidad y Consumo español para impedir que los fumadores perjudiquen a los no fumadores nos parecen loables y la iniciativa adecuada aunque llegue con décadas de retraso. Está demostrado ...
Solo un año después de hacer creer al mundo que existe una pandemia provocada por un peligrosísimo y mortal coronavirus que está matando a gran parte de la población la inmensa mayoría de las personas del planeta se han convertido en psicóticas,...
Es nauseabundo encender la televisión y escuchar decir día tras día que en el mundo apenas ha habido una decena de muertes entre millones de vacunados y que los escasos afectados por las vacunas para la Covid-19 son muy pocos y sus efectos adversos muy leves....
La desfachatez con la que se miente a la gente es inaudita. Las vacunas para la Covid-19 han provocado ya decenas de miles de muertos y cientos de miles de lesionados pero tanto las autoridades como los médicos y los periodistas de los grandes medios de comunicación continúan diciéndole a la población que son seguras....
Inicio / Revistas / Número 238 / La sinrazón de las medidas adoptadas con la excusa de la Covid-19
Jesús García Blanca: “No existen virus causantes de enfermedades”
La reciente aparición del libro Vacunas y antibióticos. Una reflexión crítica supone un nuevo e importante revés para quienes aun creen que los virus y bacterias son la causa de las llamadas enfermedades infecto-contagiosas. Hace unos días publicamos en una primera parte las reflexiones que al respecto quiso hacernos uno de sus autores, el doctor Enric Costa Vercher, y en esta ocasión hablamos sobre ello con el segundo autor: el conocido investigador social Jesús García Blanca, probablemente la persona que más ha contribuido a desvelar la farsa de la Covid-19 y la inexistencia del SARS-CoV-2, supuesto virus al que muchos atribuyen una pandemia que en realidad nunca ha existido. Somos conscientes de que quienes lean estas afirmaciones por primera vez pensarán que quienes así hablan dicen tonterías… pero es que en el ámbito sanitario –como en muchos otros– gran parte de las verdades oficiales que han sido ampliamente asumidas socialmente carecen en realidad del más mínimo fundamento. Si quiere comprobarlo, siquiera parcialmente, no tiene más que leer este artículo.