La industria alimentaria ha aprendido de la farmacéutica que una buena manera de ganar dinero es convencer al público de que sus productos tienen unas propiedades extraordinarias para tratar algún problema de salud, sea éste real o inventado. Siendo el más utilizado el convencimiento general...
Los antidepresivos "modernos" -los conocidos inhibidores de recaptación de la serotonina- de los que la fluoxetina -comercialmente más conocido como Prozac- es desde hace veinte años la estrella de los fármacos son tan eficaces para tratar ...
La inocuidad de los teléfonos móviles cuando se usan de forma habitual no está científicamente demostrada. Y punto. Antes bien, hay numerosas evidencias de su potencial peligrosidad, muy especialmente en el caso de niños y adolescentes. ...
La afirmación de que tener demasiado colesterol en sangre puede causar aterosclerosis y, por ende, todo tipo de enfermedades cardiovasculares no ha sido demostrada científicamente jamás. Antes bien, existen estudios que demuestran que ...
Que cualquier principio activo presente en una planta, un alimento o un fármaco pueda tener, diluido miles de veces, el mismo o mejor resultado terapéutico que sin diluir resulta sorprendente para cualquier médico convencional aunque ....
Las compañías farmacéuticas son legalmente responsables de los efectos secundarios de sus medicamentos. El hecho de que estén aprobados por las correspondientes agencias reguladoras no las exime de esa ...
Inicio / Revistas / Número 78 / ¿Por qué se permite comercializar fármacos peligrosos que no curan nada?
La decisión de no volver a publicar la revista impresa pero dejar online la web a fin de que las personas interesadas pudieran leer los más de 2.000 amplios reportajes publicados, las más de 4.000 noticias y el millar de cartas con respuestas a innumerables problemas de salud así como visualizar nuestros videos ha dado lugar a equívocos que nos vemos obligados a aclarar. Hay lectores que creen que la revista sigue pero en versión online y otros que van a encontrar en la web artículos y videos nuevos todos los meses cuando no es así. Los 25 euros al año dan derecho a leer y visualizar lo antedicho y no es un precio exagerado dado que la mayoría de esa información no ha perdido actualidad, sigue siendo poco conocida y si alguien dedicara media hora diaria a leerla necesitaría años. Es verdad que nuestra intención era entrevistar a personas que pudieran aportar novedades de interés y celebrar debates puntuales cuando un asunto lo requiriese así como que haríamos videos para contrarrestar la constante desinformación mediática e institucional pero ello se supeditó a que el número de interesados fuera suficientemente amplio y a que la presión externa menguase pero no ha sido así en ninguno de los dos casos. No renunciamos por tanto a subir puntualmente contenidos pero no con la intensidad y frecuencia previstas. Instamos pues a quienes se suscribieron pensando en que sería así a pedir la devolución del dinero aunque obviamente dejarán de tener acceso a la web. Basta con que lo soliciten antes del próximo 15 de marzo enviando un correo a suscripciones@dsalud.com en el que indiquen el email asociado a la suscripción y el número de pedido.