Apreciado Sr. Campoy: hace ya más de 40 años que mi difunto hermano -el médico Germán Duque Mejía- y yo fundamos lo que otrora fuera la Academia Latinoamericana de Medicina Biológica con sede en Los Robles (Popayán,...
Sr. Director: leo todos los meses la revista y quiero en primer lugar expresarle mi felicitación por el contenido y la orientación editorial que considero acertados,...
Hola amigos: soy suscriptor de la revista y os felicito por ella y la valentía de vuestros artículos. Me gustaría que publicaseis la información que tuvieseis sobre los trastornos de próstata ya que somos muchos millones de personas los que los padecemos....
Estimado Director: quisiera que publicara en la revista la Carta Abierta que he decidido hacer llegar públicamente al Dr. José Miguel Monzón, más conocido en su faceta televisiva como El Gran Wyoming....
Estimado Sr. Campoy: nos dirigimos a usted desde REDVIH, una red de personas que desde hace diez años trabajamos de forma participativa y voluntaria en todo el estado español con el objetivo de contribuir con mayor eficacia a dar respuesta a los retos que plantea el VIH y el sida....
Sr. Director: soy asidua lectora de la revista desde hace años y sé que han hablado ustedes sobre quelantes de metales pesados pero no sé si lo han hecho sobre quelantes -naturales o químicos- que ayuden a eliminar el uranio del cuerpo;...
LECTINAS: PROTEÍNAS SALUDABLES DEMONIZADAS COMO “ANTINUTRIENTES”Las propiedades citotóxicas, antitumorales, antimutagénicas y anticancerígenas de las lectinas, grupo de proteínas presentes en la mayoría de los vegetales y en algunos animales y microorganismos, se han convertido en nuevo centro de interés de investigación biomédica por su potencial para ayudar a desarrollar “fármacos diana” con los que tratar el cáncer minimizando -eso dicen- los efectos adversos de los quimioterápicos actuales. Y es que la industria farmacéutica sigue sin querer reconocer que una simple dieta basada fundamentalmente en vegetales reduce la incidencia de la obesidad, la diabetes, los trastornos inmunes, el mismo cáncer y otras muchas patologías; prefiere obviarlo para poder seguir elaborando fármacos con unas proteínas ya presentes, de hecho, en muchos alimentos. Es más, tales lectinas han empezado a ser “demonizadas” por empresarios con pocos escrúpulos que afirman ahora -falsa y gratuitamente- que son ¡las principales responsables de la mayoría de las enfermedades! y de ahí que las califiquen de “antinutrientes”. Su idea ha sido crear un problema inexistente para vender sus productos alegando que con su ingesta se resuelve el problema; estamos pues ante un nuevo caso de marketing vergonzoso al que pretende darse “pedigrí científico” y que las autoridades sanitarias consienten con su inacción. Les explicamos qué hay detrás de todo esto.